Nuestra plantación

Con las semillas de girasol que trajeron algunos de nuestros alumnos y alumnas, pusimos unas cuantas en algodón húmedo durante unos días…

En seguida vimos como las pipas se iban abriendo y de allí brotaba un pequeño tallo y dos hojas que más tarde se convertirían en cuatro.

Cuando el tallo tuvo unos diez centímetros de largo, los plantamos a una maceta.

En el proceso pudieron ver las partes de la planta: la raíz, el tallo y las hojas.

¡Qué pena que en la maceta solamente aguantasen un par de semanas!

Pero para suplir esta falta, hemos llevado a clase otro tipo de plantas … esperemos que a éstas, ¡no les ocurra lo mismo!