RELATOS DE AMOR DIFERENTES IV

UN AMOR CERCANO EN LA DISTANCIA.

Era lunes, las tres menos veinte del medio día y Rebeca llegaba a casa como siempre tras un largo día en el instituto. Se quitaba los zapatos, dejaba la mochila, el abrigo y se disponía a ser testigo (sin ser consciente) del encuentro entre tres enamoradas. Iba al baño, abría el grifo, se mojaba las manos, cogía el jabón, lo frutaba entre ellas, se las aclaraba y cerraba el grifo. Entonces, sus manos cogían la toalla de una manera especial, con delicadeza y elegancia y se pasaban minutos acariciando esa suave textura que tanto les gustaba. Cuando ya estaban secas, se daban sus últimas caricias y se despedían hasta el próximo día; pero lamentablemente el martes este encuentro no llegó a pasar. Rebeca tras haberse aclarado las manos se dirigió a un artefacto que habían colocado en la pared a la altura de su cabeza. De repente la toalla se asustó con un fuerte sonido desagradable. Las manos notaron una presión sobre ellas que no se parecía ni de reojo al cariño que les trasmitía la toalla.                                                              Las manos a la vez pensaron: “¿Qué le habrá pasado a la toalla? ¿Nos habrá cambiado por otras manos porque ya no le gustamos? Ellas no sabrían nunca que en verdad la toalla se encontraba más cerca de lo que se podían imaginar, lo que si sabían era que nunca más se habían vuelto a enamorar.

Carmen Pérez (4º B)